El mercado del automóvil en la comunidad gallega está dominado por los turismos compactos, los SUV y los híbridos y eléctricos enchufables, con cifras de matriculaciones que superan las dos mil unidades al mes. Este cuadro se completa con el auge de la caravana venta galicia motivada por el crecimiento del turismo rural y otros factores.
Pequeño, versátil y bajo en consumo: este es el perfil de un porcentaje significativo de los vehículos comercializados en Galicia. Los compactos se mueven como pez en el agua por las carreteras comarcales y las calzadas estrechas de pueblos y entornos rurales, mientras que en ciudad permiten economizar el gasto en combustible. Las limitaciones del estacionamiento tampoco supone un problema para los Clio, Sandero y otras referencias en este segmento.
Las CCAA de la cornisa cantábrica tampoco escapan a la moda de los SUV. Estos deportivos utilitarios se adaptan bien a la geografía gallega, marcada por el contraste entre el mar y la montaña, la ciudad y los espacios «verdes». Sus otras ventajas —interior cómodo y espacioso, consumo moderado, visibilidad óptima, diseño vanguardista, etcétera— terminan de inclinar la balanza a su favor frente a los todoterrenos y monovolúmenes tradicionales.
Pero en esta comunidad autónoma también hay sitio para las caravanas. De hecho, su infraestructura de parkings, áreas de servicio, etcétera, destaca entre las mejor preparadas del territorio nacional para el turismo itinerante, junto con Asturias, Cataluña y Andalucía. En este caso, el éxito de las caravanas guarda relación con el boom del ecoturismo. La oferta de parques y espacios naturales contribuye de forma decisiva al atractivo de los viajes en casa rodante.
Siguiendo la tendencia general, Galicia también ha dado la bienvenida a un aluvión de unidades híbridas, micro-híbridas y eléctricas. La conciencia ambiental y los incentivos del Gobierno y la UE justifican el interés por estos vehículos compatibles con la etiqueta Cero Emisiones