Madrid, País Vasco, La Rioja, Andalucía y otras CC. AA. permiten la libre elección de médico en el ámbito de la sanidad pública. Sin embargo, este derecho topa con algunas carencias en determinadas comunidades, lo que explica por qué un creciente número de usuarios opta por contratar seguro médico privado.
En concreto, alrededor de la mitad de los españoles disfruta de libertad para escoger el centro o profesional sanitario que desee. Pese al reconocimiento de este derecho, las distintas CC. AA. lo aplican de acuerdo con sus propios criterios, hecho que puede impedir el ejercicio de este derecho en casos específicos.
La explicación reside en que este derecho no es absoluto en todas las comunidades, y algunas exigen que su disfrute sea compatible con los límites y posibilidades de la organización y con la disponibilidad del equipo médico.
Para ejercer plenamente la libre elección de médico, el interesado sólo dispone de un recurso: las pólizas privadas de salud. Sanitas, Adeslas, Allianz, AXA y otras compañías aseguradoras comercializan multitud de productos relacionados en nuestro país.
Con estos seguros, es posible acceder a una extensa red de centros y médicos. Los asegurados obtienen, con ello, un mayor bienestar y un servicio personalizado, con la tranquilidad que supone en casos de emergencia.
De este modo, el cliente puede seleccionar al especialista de su preferencia, sin consultar siquiera a su médico de cabecera, pues la compañía de seguro se ocupa del traspaso.
Las listas no son pequeñas. La mayor parte de las pólizas médicas ofrecen decenas de miles de profesionales y clínicas entre los que elegir, con las facilidades y garantías que precise el cliente.
Como resultado, esta libertad en la elección de centro y especialista se traduce en un ahorro de tiempo y de molestias para el usuario. También se acortan las esperas.